martes, 31 de mayo de 2011



Esa sensación de no poder evitar sonreír cada vez que escucho tu voz, o la de reírme hasta cuando te odio más que a nadie. Contigo he descubierto lo que significa querer que te abracen y que no te suelten nunca, o desear cada noche poder darte un beso para pedirte que sueñes conmigo y cada mañana escuchar un buenos días. Tú me has enseñado a quererte, me has alegrado los peores momentos y lo mejor de todo, tú me has hecho ver lo que es quererme de verdad. Gracias Ángel, por quererme así cada día.                           

sábado, 21 de mayo de 2011


Siempre habrá algunos que no me valoren, que no me quieran, pero sé que tú siempre lo haces. A veces me pregunto que haría si no pudiera coger el teléfono y marcar tu número o si no te escuchara decirme que me quieres cada día de mi vida. Me has visto llorar como una niña por echarte de menos, me has sacado una sonrisa cuando nadie más podía hacerlo. 
Sé que estás lejos, que no te puedo dar un abrazo cuando lo necesitas, pero también sé que eres consciente cada segundo, de lo mucho que te quiero.